lunes, 25 de mayo de 2015

UN ESTILO DE VIDA SALUDABLE PODRÍA INCREMENTAR LA SUPERVIVENCIA DEL CÁNCER DE DE COLON.

LOS FACTORES MÁS FUERTES INCLUYEN COMER MÁS FRUTAS Y VEGETALES Y MANTENER UN PESO NORMAL ANTES DEL DIAGNÓSTICO.LA ALIMENTACIÓN BALANCEADA AUNADA A  LA ACTIVIDAD FÍSICA CONSTITUYEN LOS PILARES PARA TENER UNA VIDA SALUDABLE Y, MUCHAS VECES, PODRÍA AYUDAR EN LA PREVENCIÓN DE VARIOS TIPOS DE CÁNCER. 
 Los pacientes de cáncer de colon parecen tener mejores probabilidades de sobrevivir si habían practicado hábitos de un estilo de vida saludable antes del diagnóstico, sugirió un nuevo estudio.
Las tasas de supervivencia para el cáncer de colon varían ampliamente, incluso entre los pacientes con tumores similares o que recibieron el mismo tratamiento. Se ha sugerido que los factores en el estilo de vida antes y después del diagnóstico de cáncer de colon juegan un papel, de acuerdo con los autores del estudio.
La nueva investigación apoya la idea de que entre más saludable sea el estilo de vida de una persona antes del diagnóstico, son mejores las probabilidades de sobrevivir.
Sin embargo, se debe señalar que el estudio solamente fue diseñado para mostrar una asociación entre los factores de un estilo de vida saludable y una mejor probabilidad de sobrevivir; no demostró que estos factores causen directamente los mejores resultados de supervivencia.
El estudio incluyó información de más de 520,000 personas en 10 países europeos. Se le dio seguimiento a su salud por un promedio de seis años. Durante este tiempo, casi 3,300 de los participantes fueron diagnosticados con cáncer de colon.
Los pacientes recibieron calificaciones basadas en qué tan bien seguían los lineamientos para un estilo de vida más saludable en áreas como alimentación, actividad física y peso. El nuevo estudio reveló que tener un peso saludable y un alto consumo de alimentos vegetales estuvieron fuertemente vinculados con la supervivencia .  
Los investigadores también encontraron que las mujeres que amamantaron tenían mejores probabilidades de sobrevivir que las que no lo hicieron. Este vínculo ha sido encontrado en el cáncer de mama, pero esta es la primera vez que ha sido encontrado en el cáncer de colon, dijeron los autores del estudio.
"Los resultados del estudio demostraron que un estilo de vida saludable durante la vida adulta, junto con las recomendaciones sobre la dieta, la actividad física y el peso corporal para la prevención del cáncer, no solo previenen el desarrollo del cáncer [colon] intestinal sino, en aquellos que eventualmente lo desarrollaron, mejora la supervivencia", dijo la autora principal Dora Romaguera, del Colegio Imperial de Londres (Imperial College London), en un comunicado de prensa de la revista.
Sin embargo, no se sabe si adoptar hábitos de un estilo de vida más saludable tras un diagnóstico de cáncer de colon puede mejorar las probabilidades de supervivencia de los pacientes. Se necesita más investigación para averiguar si ese es el caso, dijeron los autores del estudio.

FUENTE: BMC Medicine;May 6th, 2015

sábado, 23 de mayo de 2015

CAMINAR 2 MINUTOS CADA HORA PODRÍA CONTRARRESTAR LOS EFECTOS DE ESTAR SENTADO MUCHO TIEMPO

UN ESTUDIO DESCUBRIÓ QUE PEQUEÑOS PERIODOS DE ACTIVIDAD FÍSICA PARECEN ALARGAR LA VIDA. MUCHAS PERSONAS LABORAN SENTADAS POR VARIAS HORAS Y  ESTE ESTUDIO CONTRIBUYE A ENFATIZAR LA IMPORTANCIA DE LA ACTIVIDAD FÍSICA Y LA RECOMENDACIÓN DE LA OMS QUE ES CAMINAR DURANTE EL DÍA 30 MINUTOS PARA TENER BUENA CALIDAD DE VIDA .  

Pararse y caminar dos minutos cada hora podría revertir los efectos negativos de estar sentado mucho tiempo, sugirió un nuevo estudio. Estudios anteriores han mostrado que permanecer mucho tiempo sentado cada día puede aumentar el riesgo de varios problemas de salud como cardiopatía, diabetes, y muerte prematura.
Las recomendaciones actuales de ejercicio dicen que los adultos deberían realizar por lo menos 2.5 horas de actividad física moderada por semana, pero el 80 por ciento de los estadounidenses no siguen esta recomendaciónEstos nuevos resultados (si se confirman) sugieren que incluso los periodos cortos de actividad moderada ofrecen beneficios a la salud.
“El ejercicio es muy bueno, pero la realidad es que hay un límite a cuánto ejercicio intenso se puede realizar. Nuestro estudio sugiere que incluso los cambios pequeños pueden tener un gran impacto”, dijo el autor principal del artículo, Tom Greene, director del Centro de Diseño de Estudios y Bioestadísticas en el Centro para las Ciencias Clínicas y Aplicables en la Escuela de Medicina de la Universidad de Utah en Salt Lake City.
El estudio usó la información de más de 3,200 personas que participaron en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (U.S. National Health and Nutrition Examination Survey). Los voluntarios usaron aparatos para medir la intensidad de sus actividades.
 Los investigadores compararon los beneficios de salud de episodios más largos de actividades de baja intensidad, como estar parado, contra actividades de intensidad leve, como caminar. El estudio siguió a los participantes por tres años. En ese tiempo, murieron 137 personas.
Se descubrió que permanecer más tiempo de pie no es suficiente para contrarrestar los peligros de pasar mucho tiempo sentado, pero pequeños arranques de actividad de baja intensidad, como caminar, limpiar o arreglar el jardín, pueden aumentar la longevidad de las personas que pasan más de la mitad de su día sentados.
Cambiar dos minutos de estar sentado por dos minutos de actividades de baja intensidad cada hora redujo el riesgo de muerte prematura un 33 por ciento, según reveló el estudio.
“Nos fascinó ver los resultados debido al enfoque actual que hay en actividades de intensidad moderada o alta. Nos intrigó ver que las actividades de intensidad leve se asociaron con menores índices de mortalidad” dijo el doctor Srinivasan Beddhu, autor principal del artículo y profesor de medicina en la universidad, en un comunicado de prensa de ésta.
A lo largo de días y semanas, los beneficios de caminar se pueden ir sumando para que las personas sedentarias se puedan acercar a las recomendaciones semanales de ejercicio, explicaron los investigadores.
“Con base en estos resultados, nos gustaría recomendar que se añada caminar dos minutos cada hora, además de las actividades normales, que deberían incluir 2.5 horas de ejercicio moderado por semana”, dijo Beddhu. El ejercicio de intensidad moderada fortalece el corazón, los músculos y los huesos, además de brindar beneficios que las actividades de menor intensidad no, según notas antecedentes que acompañan el estudio.

FUENTEClinical Journal of the American Society of Nephrology: April 30, 2015

Prueba cutànea para detectar Alzheimer, detectan cientìficos en Mèxico.

Científicos de la Universidad de San Luis Potosí, en México, propusieron desarrollar una prueba cutánea para detectar anormalidades cerebrales, incluyendo el mal de Alzheimer.
La investigación, que se encuentra en sus etapas iniciales, encontró que las mismas proteínas anormales que se acumulan en el cerebrocon dichas condiciones también se pueden encontrar en la piel.
El diagnóstico temprano es clave para prevenir la pérdida de tejido cerebral en casos de demencia, que puede estar presente durante años sin ser detectada.
No obstante, los expertos señalan que las pruebas más avanzadas, incluyendo las de fluido cefalorraquídeo, todavía no están listas para la etapa clínica.
Indicadores biológicos
Durante años, investigadores han estado al asecho de indicadores biológicos en el cuerpo; moléculas en la sangre o en la exhalación pulmonar, que puedan ser medidos con exactitud como una señal de la presencia de una enfermedad o desorden.
Según el doctor Ildefonso Rodríguez Leyva, el tejido de la piel tiene el mismo origen en el embrión en desarrollo que el tejido del cerebro y podría, entonces, ser una buena vitrina a lo que le pasa a la mente más tarde en la vida, por lo menos a nivel molecular.
Estudios realizados post mortem a pacientes con mal de Parkinson revelaron que los mismos depósitos presentes en el cerebro afectado por esa condición también se acumulan en la piel.
Para estudiar si lo mismo sucede en vida, el equipo científico reclutó 65 voluntarios, 53 de estos con Parkinson, Alzheimer u otro tipo de demencia. Los otros doce fueron pacientes saludables como medida de control.
A los voluntarios se les tomó una muestra de atrás de la oreja para someterla a pruebas de laboratorio en busca de señales delatoras de enfermedad.
Específicamente, buscaron la presencia de dos proteínas: tau y alfa-sinucleína.
Las 20 personas con Alzheimer y las 16 con Parkinson tenían un incremento en los niveles de ambas proteínas en su piel, comparados con los pacientes saludables de control y los que tenían otro tipo de demencia.
Diagnóstico temprano
El doctor Rodríguez Leyva presentará sus resultados durante la reunión anual de la Academia de Neurología de Estados Unidos.
"Se necesita más investigación para confirmar estos resultados pero estos hallazgos son emocionantes porque potencialmente podríamos empezar a usar biopsias de pacientes vivos para estudiar y conocer más sobre estas enfermedades", manifestó.
"Esta nueva prueba ofrece un indicador biológico que permitiría a los médicos identificar y diagnosticar estas enfermedades temprano", dijo Rodríguez Leyva, añadiendo que serviría también como una guía hacia nuevos tratamientos.
El doctor Arthur Roach, director de Investigación y Desarrollo de Parkinson en Reino Unido, manifestó entusiasmo por la propuesta de un posible diagnóstico que podría ser mínimamente invasivo y podría proveer un diagnóstico más preciso y temprano.
Aunque es apenas una etapa inicial, indicó que "se necesita más innovación en este campo pues, actualmente, no hay manera definitiva de diagnosticar el Parkinson".
Por su parte, el doctor Simon Ridley, de una institución británica que investiga Alzheimer, señaló que la investigación de pruebas con fluido cefalorraquídeo está en una etapa más avanzada pero, aún este método, está lejos de convertirse en una prueba rutinaria para el diagnóstico de la enfermedad.
 Fuente: http://elcomercio.pe/ciencias/investigaciones/cientificos-proponen-prueba-cutanea-detectar-alzheimer-noticia-1793791?ref=nota_ciencias&ft=mod_leatambien&e=titulo

La deficiencia de la Vitamina E puede dañar el cerebro.

Compartimos la siguiente información por considerarlo interesante: 
La vitaminas E, compuesto  liposolubles que ayuda a prevenir el estrés oxidativo del cuerpo, son cruciales para la salud neuronal, según un estudio de la Universidad Estatal de Oregon (EE.UU.)
La investigación, publicada en la revista The Journal of Lipid Research, se llevó a cabo con especímenes de pez cebra que fueron alimentados con una dieta deficiente en vitamina E durante toda su vida. Se empleó los peces cebra debido a que su similitud genética con el ser humano es del 70% y permite visualizar la formación de las células en tiempo real.
Los resultados del estudio revelaron que la falta de vitamina E causó daños en el cerebro, por la interrupción del suministro de nutrientes que son cruciales para la salud neuronal. En ese sentido, estos peces tenían los niveles de DHA-PC (componente de la membrana celular de las neuronas) un 30% más bajos que los peces que fueron alimentados con una dieta equilibrada y con alimentos ricos envitamina E. En los seres humanos, la deficiencia de DHA-PC ha sido asociada a un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad deAlzheimer.
“No se puede construir una casa sin los materiales necesarios. En cierto sentido, si la vitamina E es inadecuada, estamos recortando en más de la mitad de la cantidad de materiales con los que podemos construir y mantener el cerebro”, explica Maret Traber, impulsor del estudio.
Además, los peces también mostraron unos niveles anormalmente bajos (un 60% menos) de lysoPLs (lisofosfolípidounos), compuestos necesarios para obtener DHA en el cerebro. El ácido docosahexaenoico o DHA es clave en el desarrollo cerebral, la memoria y el aprendizaje.
“Hay pruebas cada vez más claras de que la vitamina E se asocia con la protección del cerebro, y ahora estamos empezando a comprender mejor algunos de los mecanismos subyacentes. Esta investigación demostró que es necesaria la vitamina E para prevenir una dramática pérdida de una molécula de importancia crítica en el cerebro y ayuda a explicar por qué es necesaria la vitamina E para la salud del cerebro”, argumenta Traber.
Fuente: muyinteresante.com
http://elcomercio.pe/ciencias/medicina/deficiencia-vitamina-puede-danar-cerebro-noticia-1804582

viernes, 27 de febrero de 2015

AUMENTA LA ALIMENTACIÓN SALUDABLE EN TODO EL MUNDO, PERO LA ALIMENTACIÓN MALSANA AUMENTA INCLUSO MÁS,SEGÚN UN ESTUDIO.

ES IMPORTANTE RESALTAR QUE EL CONSUMO DE VEGETALES, ESPECIALMENTE FRUTAS, ESTARÍA INCREMENTÁNDOSE EN NUESTRO PAÍS, LO QUE VA A CONTRIBUIR A QUE LA POBLACIÓN NO GANE PESO. ESTA RECOMENDACIÓN , DEBE ENFATIZARSE EN LA ALIMENTACIÓN DE NUESTROS NIÑOS, PORQUE LOS ÍNDICES DE SOBREPESO U OBESIDAD INFANTIL ESTÁN AUMENTANDO. SUMADO A LA POCA ACTIVIDAD FÍSICA.

EN EL PRESENTE ESTUDIO SE DESTACA QUE EE. UU. TUVO UNA DE LAS DIETAS DE PEOR CALIDAD,DEBIDO AL ALTO CONSUMO DE ALIMENTOS CONSIDERADOS MALOS. 
Aunque las personas de todo el mundo están comiendo más alimentos saludables, esa tendencia positiva se ha visto superada por un creciente consumo de alimentos malsanos, según un estudio reciente.
Los investigadores analizaron las dietas de casi 4.5 mil millones de adultos de 187 países, y encontraron que la ingesta de alimentos saludables, como las frutas y las verduras, aumentó entre 1990 y 2010. Pero hubo un aumento incluso mayor en el consumo de alimentos malsanos, como las carnes procesadas y las bebidas endulzadas con azúcar.
"Las proyecciones indican que en 2020 las enfermedades no contagiosas explicarán el 75 por ciento de todas las muertes. La mejora de la dieta tiene un rol esencial en la reducción de esa carga", aseguró en un comunicado de prensa de la revista el líder del estudio, Fumiaki Imamura, de la unidad de epidemiología del Consejo de Investigación Médica de la Universidad de Cambridge en Reino Unido.
"Nuestros hallazgos tienen implicaciones para los gobiernos y los organismos internacionales de todo el mundo... [e] indican la necesidad de comprender las distintas causas múltiples de esas tendencias", explicó Imamura.
Las mayores mejoras en la calidad de la dieta fueron en los países de altos ingresos, con aumentos en la cantidad de alimentos saludables que las personas comían, y ligeras reducciones en su ingesta de comida malsana.
Pero las personas de Estados Unidos y varias otras regiones de las más ricas (Canadá, Europa Occidental, Australia y Nueva Zelanda) siguen teniendo algunas de las dietas de peor calidad del mundo, debido a su gran consumo de comida malsana.
Algunos países en África subsahariana y en Asia (como China e India) no mostraron mejoras en la calidad de la dieta entre 1990 y 2010, según el estudio.
Varios países de bajos ingresos, como Chad y Mali, y países mediterráneos, como Turquía y Grecia, tuvieron las puntuaciones más altas de alimentos saludables. El análisis también mostró que las personas mayores y las mujeres tendían a tener las dietas más saludables.
El hallazgo de que la alimentación malsana está aumentando con una mayor rapidez que la alimentación saludable en gran parte del mundo es motivo de preocupación, y se deben tomar medidas para revertir esa tendencia, plantearon los investigadores.
"Hay una necesidad particularmente urgente de enfocarse en mejorar la calidad de la dieta en las poblaciones más pobres. Si no hacemos nada, la falta de nutrición se verá muy pronto eclipsada por la obesidad y las enfermedades no contagiosas, como ya se ve en India, China y otros países de ingresos medios", comentó el autor principal del estudio, el Dr. Dariush Mozaffarian, Decano de la Facultad de Ciencias y Políticas de la Nutrición de la Universidad de Tufts, en Boston.
En un comentario que acompañó al informe, Carlo La Vecchia, de la Universidad de Milán en Italia, y Lluis Serra-Majem, de la Universidad de las Palmas de Gran Canaria en España, escribieron que "el enfoque clave de este artículo sigue siendo la necesidad de comprender la industria agrícola, comercial y alimentaria, y los determinantes de las políticas sanitarias, para mejorar los patrones dietéticos y la nutrición en varias áreas, tomando en cuenta las características tradicionales de las dietas de todo el mundo.
FUENTE: The Lancet Global Health, news release, Feb. 18, 2015

REALIZAR UNA ACTIVIDAD LIGERA ES BUENO PARA EL CORAZÓN DE LAS PERSONAS MAYORES

LA ACTIVIDAD FÍSICA ES RECOMENDADA POR LA OMS PARA TENER UNA BUENA SALUD CARDIOVASCULAR. 30 MINUTOS AL DÍA , HACIENDO UN TOTAL MÍNIMO DE 150 MINUTOS A LA SEMANA ES LO ESTABLECIDO PARA EVITAR EL AUMENTO DE PESO , LA OBESIDAD Y TODAS SUS COMPLICACIONES.SEGÚN UN INTERESANTE ESTUDIO, EL MOVIMIENTO DE BAJO NIVEL AYUDA A LOS ADULTOS MAYORES QUIENES TIENEN UNA MOVILIDAD LIMITADA.
La actividad física ligera podría ser beneficiosa para el corazón de las personas mayores, incluso si tienen problemas de movilidad, sugiere un estudio reciente.
Es bien sabido que el ejercicio regular puede ser bueno para el corazón a cualquier edad. Pero hay pocas evidencias de si la actividad ligera puede ser beneficiosa para las personas mayores con problemas físicos (como, por ejemplo, artritis de rodilla) que limitan su capacidad de hacer ejercicio.
"Oímos el consejo de hacer al menos 30 minutos de ejercicio moderado al día, pero eso puede ser bastante difícil para las personas mayores con una movilidad limitada", dijo Thomas Buford, investigador principal del estudio y director del Centro de Promoción de la Salud del Instituto sobre el Envejecimiento de la Universidad de Florida, en Gainesville.
El equipo de Buford halló algunos resultados esperanzadores. De casi 1,200 personas mayores con una movilidad limitada, las que podían realizar algunos movimientos (como un trabajo doméstico ligero o andar despacio) tenían un riesgo previsto más bajo de sufrir un ataque cardiaco en los próximos 10 años.
"El hecho de que reducir la cantidad de tiempo que se pasa sedentario podría tener beneficios cardiovasculares es un concepto importante", dijo Buford. La advertencia, sin embargo, es que el estudio no demuestra en realidad que la actividad ligera prevenga los ataques cardiacos en las personas mayores, dijo Buford.
Su equipo observó la asociación entre los niveles de actividad diaria de las personas mayores y el riesgo que se predice de que sufran un ataque cardiaco o mueran de una enfermedad cardiaca en 10 años. Esto se hizo mediante una "calculadora" estándar que estima las probabilidades de una persona de sufrir un problema cardiaco en el futuro.
"En lo que de verdad estamos interesados es en observar, a lo largo del tiempo, cómo [los niveles de actividad] se relacionan con las tasas reales de eventos de enfermedades cardiacas coronarias", dijo Buford.
Aun así, los hallazgos deberían animar a los médicos y a las familias a ayudar a las personas mayores a encontrar la manera de permanecer activas, señaló el Dr. Gerald Fletcher, cardiólogo en la Clínica Mayo en Jacksonville, Florida, y vocero de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association).
"Tiene que ser algo que sea seguro", dijo Fletcher. "Pero hay muchas buenas opciones para ello".
Las clases en un gimnasio local o en un centro de personas mayores, diseñadas específicamente para las personas mayores con limitaciones físicas, son una buena opción, comentó Fletcher. Aprender ejercicios sencillos para realizar en casa es otra opción, dijo, sobre todo para los que deben permanecer en interiores por el mal tiempo,
"Que su médico le aconseje y le anime es importante", señaló Fletcher. "Y creo que los médicos deben hacerlo mejor con respecto a esto".
El actual estudio incluyó a 1,170 personas de entre 70 y 89 años con algunas limitaciones en su movilidad. Buford dijo que podían caminar hasta cierta distancia (aproximadamente una vuelta en una pista) sin ayuda, pero tenían dificultades para subir por las escaleras o para caminar a un paso más rápido.
Los participantes del estudio llevaron puestos unos acelerómetros, que registraban sus movimientos a lo largo de un día normal, durante al menos una semana.
El equipo de Buford hallo que, de promedio, las personas del grupo de estudio se mantenían sedentarias durante más de 10 horas al día. Pasaron otras tres horas más o menos siendo activas, la mayoría a un nivel equivalente a hacer de forma ligera las tareas domésticas o a caminar lentamente. 
Incluso esa actividad ligera pareció marcar una diferencia. "Por cada 25 o 30 minutos que una persona se mantenía sedentaria, el riesgo que se predecía de [ataque cardiaco o muerte] aumentaba en un 1 por ciento", dijo Buford.
Y esa conexión no se explicó por factores como la existencia de problemas cardiacos, dormir mal o síntomas de depresión, hallaron los investigadores.
"Creo que este y otros estudios nos muestran que nunca es demasiado tarde para que las personas se beneficien de la actividad física", señaló Buford.  Y en función de los hallazgos actuales, añadió,incluso las actividades "pequeñas y factibles" diarias podrían ser buenas para el corazón.
Pero Buford se mostró de acuerdo en que el ejercicio estructurado y supervisado también puede ser una buena opción para las personas mayores con problemas de movilidad.
"Las personas mayores a menudo disfrutan del aspecto social de las clases", dijo. "Y eso puede ayudar a motivarlas a permanecer activas".
Fletcher se mostró de acuerdo, e indicó que el ejercicio, por sí mismo, puede tener beneficios más allá de la salud física. "Creo que cuando las personas mayores permanecen activas, simplemente disfrutan más de la vida", dijo.

FUENTE:  Journal of the American Heart Associat : 18, February, 2015

miércoles, 7 de enero de 2015

MÁS EVIDENCIAS QUE UNA VIDA SALUDABLE HACE MARAVILLAS POR EL CORAZÓN DE LAS MUJERES

EL ESTILO DE VIDA QUE TENGAMOS INFLUIRÁ EN LA SALUD DE NUESTRO CORAZÓN.
UN ESTUDIO HALLÓ QUE UNA DIETA SALUDABLE Y REALIZAR ACTIVIDAD FÍSICA REDUCÍAN LAS PROBABILIDADES DE SUFRIR UNA ENFERMEDAD CARDÍACA HASTA EN 90%. 

   Las mujeres pueden reducir de forma dramática sus probabilidades de sufrir una enfermedad cardiaca antes de la vejez si siguen las directrices para una vida saludable, según un estudio a largo plazo de gran tamaño.
El estudio encontró que las mujeres que seguían seis recomendaciones para una vida saludable, como comer una dieta saludable y hacer ejercicio de forma regular, reducían sus probabilidades de sufrir una enfermedad cardiaca en alrededor de un 90 por ciento en un transcurso de 20 años, en comparación con las mujeres con los estilos de vida más malsanos.
Los investigadores también estimaron que los estilos de vida malsanos eran responsables de casi el 75 por ciento de los casos de enfermedades cardiacas en las mujeres más jóvenes y de mediana edad.
"Adoptar o mantener un estilo de vida saludable podría reducir sustancialmente la incidencia de diabetes, hipertensión y colesterol alto, además de reducir la incidencia de enfermedad de la arteria coronaria en las mujeres jóvenes", afirmó la autora líder del estudio, Andrea Chomistek, profesora asistente de epidemiología y bioestadística de la Universidad de Indiana, en Bloomington.
Aunque las muertes por problemas cardiacos en las mujeres de 35 a 44 años son poco comunes, la tasa de esas muertes ha permanecido más o menos igual en las cuatro últimas décadas. Pero al mismo tiempo, en general menos gente muere de enfermedades cardiacas en Estados Unidos, dijo Chomistek. "Unas opciones malsanas de estilo de vida podrían explicar esas diferencias", aseguró.
"Un estilo de vida saludable también se asoció con una reducción significativa en el riesgo de contraer una enfermedad cardiaca entre las mujeres que ya habían desarrollado un factor de riesgo cardiovascular, como la diabetes, la hipertensión o el colesterol alto", comentó.
El estudio siguió a casi 90,000 enfermeras entre 1991 y 2011. Las mujeres tenían de 27 a 44 años cuando comenzó el estudio.
Los investigadores se enfocaron en seis conductas descritas como saludables: no fumar, hacer al menos 2.5 horas de ejercicio a la semana, tener un peso normal, ver siete horas o menos de televisión a la semana, comer una dieta saludable y beber algo de alcohol pero no más de una copa al día.
Alrededor del 5 por ciento de las mujeres encajaban en esa categoría en un momento dado, según Chomistek.
El estudio también observó los factores de riesgo de las enfermedades cardiacas, como la diabetes, el colesterol alto y la hipertensión. "Aunque las enfermedades cardiacas son bastante raras en las mujeres jóvenes, contraer un factor de riesgo de enfermedades cardiacas no lo es", afirmó.
Alrededor del 45 por ciento de las mujeres contrajeron uno de esos factores de riesgo durante el periodo de 20 años del estudio, señaló Chomistek. Y un estilo de vida saludable también ayudó a esas mujeres, halló el estudio.
"Las mujeres que tenían diabetes, hipertensión o colesterol alto y que mantenían un estilo de vida saludable tenían un riesgo mucho más bajo de al final contraer una enfermedad cardiaca (como sufrir un ataque cardiaco) en comparación con las mujeres que no mantenían un estilo de vida saludable", planteó.
"Muchas de esas mujeres recibían tratamiento para sus factores de riesgo, pero el estilo de vida seguía siendo muy importante para la prevención de una enfermedad cardiaca posterior", anotó Chomistek.
¿Serían esos hallazgos similares en los hombres? Las tasas de mortalidad por enfermedad cardiaca en los hombres más jóvenes se han resistido de forma empecinada a declinar, como las de las mujeres, "y eso amerita más estudio", dijo Chomistek.
En ambos sexos, "hay una evidencia inequívoca de que un patrón alimentario saludable, ser físicamente activo, mantener un peso corporal ideal y no fumar se relacionan firmemente con una reducción en el riesgo de enfermedad cardiaca", señaló Donna Arnett, catedrática de epidemiología de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Alabama, en Birmingham, y ex presidenta de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association). 
Muchas mujeres "carecen del conocimiento de que las enfermedades cardiacas les puede afectar a cualquier edad, y quizá no reconozcan los síntomas de las enfermedades cardiacas", señaló Arnett. "Aunque muchas mujeres tienen síntomas clásicos de ataque cardiaco (como un dolor muy grande en el centro del pecho que se extiende al cuello o al brazo, falta de aire y sudoración copiosa), otras presentan dolor de espalda o indigestión".
Este estudio confirma la importancia de las conductas saludables, como no fumar y hacer más ejercicio, dijo Arnett. Y estos hallazgos también desempeñan un papel en cambiar la discusión pública hacia "crear un mundo en que hacer esas cosas sea la opción por defecto".

FUENTE:  Journal of the American College of Cardiology .Jan. 6/13, 2015